UN TEMA MÁS VIGENTE QUE NUNCA
Sin duda todos hemos oído anécdotas de desalojo: ya sea que nos enteremos por fuentes cercanas, que hayamos presenciado de lejos alguna escena, o bien hayamos leído en las noticias, es una situación que aunque probablemente no nos ha pasado directamente, sí sabemos que existe, y por supuesto que varios podríamos pensar estamos muy lejos de pasar por tan lamentables sucesos.
¿Pero, estamos seguros de ello? Porque cabe recordar que el pasado octubre el gobierno de la CDMX anunció un convenio con #Airbnb – la plataforma online dedicada a la oferta de alojamientos a particulares y turísticos- junto con la Unesco para promover a la capital como destino para “nómadas digitales”, no solo de zonas turísticas – como el centro histórico y sus alrededores- sino también de barrios en condiciones de pobreza, todo esto para mejorar el flujo económico. Sin embargo, esta estrategia es de cuestionarse, porque estamos hablando de Gentrificación, concepto en el que vale la pena detenernos para entender no solo la gravedad del asunto sino el nuevo film de la Directora Iria Gómez.
La Real Academia Española define como #Gentrificación, “al proceso de renovación de una zona urbana, generalmente popular o deteriorada que implica el desplazamiento de la población original por parte de otra de un mayor poder adquisitivo”, la palabra inglesa gentrification deriva del sustantivo “gentry”, la cuál significa “alta burguesía o pequeña aristocracia”,
y he aquí el tema central del maravilloso film que aunque estrenado en 2018 en los festivales de Cine, por fin llega a la cartelera comercial.
Premio a mejor película Festival Internacional de Guanajuato.
Antes del olvido, tiene todo qué ver con la situación de desplazamiento de las poblaciones nativas principalmente de los centros históricos , que actualmente estamos viviendo no solo en la #CDMX, sino en muchos otros estados como lo es Michoacán, Guanajuato e incluso Oaxaca- como expresa el actor Leonardo Alonso en conferencia de presa, quien da vida al personaje de Fermín. Y es que la tendencia de convertir las zonas populares en “bellos” corredores, donde los turistas además de alojarse puedan vivir la experiencia del “barrio”, no solo significa la destrucción de las zonas, el desalojo de sus habitantes, sino un atentado contra la identidad de las comunidades y sus historias. Ante las exigencias del mercado, edificios antiguos son tirados o reconstruidos casi por completo no para bien de las comunidades originarias sino para los estándares comerciales, elevando los precios de los productos en las zonas, orillando a los pobladores a migrar hacia las periferias.
¿DE QUÉ VA ENTONCES LA HISTORIA?
Este film da rostro a las personas que viven estas situaciones, a través de sus historias, de su lucha, a través de sus reflexiones. El arte de este film, recae en su trabajo con actores naturales que logra rescatar su esencia como individuos, pero sobre todo como comunidad. Personajes como "Elvirita" y el "Gordo" son ejemplo del gran trabajo de Dirección para lograr un cine realista y reflexivo . Si bien tienen mayor peso los actores Leonardo Alonso (Fermín) , Mercedes Hernández (María) y el joven actor Santiago Fonseca (Maco) , es un trabajo coral que sin duda disfrutarás.
Y es que un día una empresa coludida con el gobierno amenazan con desalojar la vecindad que habitan nuestros protagonistas, para convertirla en un centro comercial. Ante la amenaza del desalojo, los inquilinos de la vecindad se unen solidariamente para salir de su ensimismamiento y luchar por una causa común. Las líneas importantes las marcan María, quien nos enseña que siempre habrá lugar para uno más, y que nos recuerda el valor de la solidaridad, pero también esa esencia del mexicano donde “mi casa es tu casa”, así como de la lucha y nuestro derecho a protesta; Maco, quien reencarna a esa juventud reflexiva, noble, por la que vale la pena luchar; y Fermín que representa los estragos de una economía desigual.
¿CÓMO CONECTA ESTA HISTORIA CON NOSOTROS?
Pues fácil, con el nuevo convenio, lo que ocurre es que las rentas aumentan, lo que es costeable para un extranjero es impagable para un local, con esto, los habitantes locales, terminan si no siendo desalojados a la fuerza, sí siendo orillados a mudarse de dichas zonas por el aumento de los precios no solo en las rentas sino de todos los productos alrededor. Han pasado varios casos donde a los inquilinos ya no se les renueva el contrato, porque los edificios o casas que habitaban ahora están pensados para ser hoteles o cuartos de airbnb. Atraer el turismo no valdría la pena si para ello hay qué desalojar a las poblaciones originarias, pues ellas son la razón de la magia de los pueblos.
Las vecindades, su color, su historia, no son tan lejanas entonces a nosotros cuando volteamos a ver este tipo de situaciones. Las tendencias del mercado no pueden marcar nuestro paso por la historia. Por ello este film, el cuál no solo vale la pena por su trabajo de Dirección, Fotografía, Producción y Actuación Coral, es necesario para el debate y reflexión de nuestras propias comunidades ante convenios que podrían perjudicar la estadía de nuestras raíces.
Productor: Rodrigo Ríos. Directora: Iria Gómez. Actores: Santiago Fonseca, Leonardo Alonso, Mercedes Hernández.
Antes del olvido se estrena este viernes en la Cineteca Nacional, pero también podrás seguir su paso por el circuito alternativo de cines del país.
CS
¿TE INTERESÓ ESTE FILM? TE INVITAMOS A VER LA ENTREVISTA DE LOS AMIGOS DE LA REVISTA ENCUADRES https://www.youtube.com/watch?v=PNZUFeglc7M